martes, 20 de abril de 2010
Púrpura imperial (Guillian Bradshaw)
domingo, 21 de marzo de 2010
Kimismo (Elisa Cotarelo)
jueves, 11 de marzo de 2010
El hijo del ladrón (César Fernández García)
El hijo del ladrón es una novela que habla de tesoros auténticos. Por una parte, de uno que permanece enterrado desde 1490 en una montaña de Tenerife. Por otro lado, de los tesoros que también se esconden en nuestro propio mundo interior.
El protagonista es Ramón, un chico de unos doce años que vive con una familia de adopción. Las desgracias se sucedieron en su infancia. Su madre murió antes de que él tuviera uso de razón. Cuando sólo contaba con cinco años de edad, su padre ingresó en prisión. Lo acusaron de formar parte de una banda que había desenterrado un conjunto de obras de cerámica guanche sin permiso oficial y con el único fin de apropiárselo.
En el primer capítulo se presenta la situación conflictiva que es el motor de toda la historia: el padre – al que su hijo nunca llamará papá, sino Juan Andrés – ha salido de prisión y pretende recuperar a su hijo. De hecho, ha conseguido un permiso del juez para llevárselo durante dos semanas al hotel Las Águilas de Tenerife. Como no tiene dinero, Juan Andrés deberá trabajar medio día como jardinero en el hotel. La otra parte del día la tiene libre para estar con su hijo. Pero el problema es que, precisamente, Ramón no desea estar con su padre biológico. Se avergüenza de él. Incluso sospecha que ya en el aeropuerto ha robado un monedero a una señora. Juan Andrés es un ladrón. A pesar de estar convencido del pasado y del presente delictivo de su padre, Ramón no tiene más remedio que acompañarlo a Tenerife.
Una vez en la isla, Ramón conoce a Raquel, hija de otros empleados del hotel. Enseguida se hacen amigos y confidentes. Durante unos días, la chica será la salvación para Ramón que no aguanta la compañía de su padre. Sin embargo, Juan Andrés no pierde la esperanza de convencer a su hijo de que no es un ladrón. De que jamás lo fue. De que ingresó injustamente en la cárcel. Y de que está dispuesto a luchar por su cariño.
Varios obstáculos se interponen en los planes de Juan Andrés. Entre ellos, el robo de un reloj que el guardia de seguridad le achaca. Y también la adquisición que hace de un cuadro del que sabe que le puede guiar al famoso tesoro de Bencomo, un jefe guanche que en 1490 encontró un barco que había naufragado en sus dominios. El barco transportaba un enorme cofre repleto de joyas. Bencomo lo enterró. Tres siglos después, un ayudante del famoso científico Humboldt lo encontró pero, por diversas circunstancias, no se lo pudo llevar. A cambio, dejó un mensaje en el cuadro que Juan Andrés ha adquirido.
Tras la compra del cuadro, Ramón tiene muy claro que su padre vuelve a las mismas acciones por las que fue a la cárcel. Sin embargo, Raquel le animará a darle una oportunidad. Poco a poco, el chico no sólo le irá creyendo, sino que también irá participando en la recuperación del legendario tesoro de Bencomo.
Por supuesto, habrá muchos problemas, pasos en falso, persecuciones, aventuras peligrosas, pistas falsas, enigmas en la que será necesaria la deducción lógica. Pero, la meta quizás pueda recompensar de tantos trabajos y riesgos. No sólo espera un cofre de joyas que iría a nutrir el patrimonio de las Islas Canarias. El reencuentro afectivo entre un padre y un hijo es también en sí mismo un auténtico tesoro.
La genialidad de esta novela es que admite distintos niveles de lectura. Para los lectores a partir de diez años que buscan aventuras, se ofrece una narración que avanza, sin treguas ni trampas, hacia un desenlace impactante. Para los lectores que les gusta ser conmovidos, esta historia no les va a defraudar. Para todos, el relato va a secuestrar la atención desde la primera línea hasta la última palabra.
martes, 9 de marzo de 2010
En Llamas (Suzanne Collins)
¡Ya hay fecha para la tercera parte de la saga! Se llamará "Sinsajo" y saldrá en España el 2 de septiembre.
lunes, 8 de marzo de 2010
Días de Lobos (Miguel Luis Sancho)
En la novela Días de lobos de Miguel Luis Sancho se cuenta la historia de Sofía, una chica de ciudad, que va a pasar las vacaciones de Navidad con su padre al valle de Lupama, un recóndito rincón de la cordillera Cantábrica.
Nada más llegar, mientras pasea por los alrededores de su alojamiento, la muchacha tiene un inesperado encuentro con unos ojos que brillan entre las sombras. A partir de ahí, la acción se disparada, desplegando una trama sorprendente y llena de misterio.
Junto a su padre, visita un pueblo abandonado en la sierra, donde vivieron sus antepasados. Mientras tanto, varios cazadores furtivos baten los montes en busca de una presa, quizás el último lobo protagonista de una vieja leyenda.
En sus aventuras le acompañará también Tito, un muchacho de su edad que acaba de conocer en el pueblo. Junto a él descubrirá la amistad, pero también el secreto más olvidado que esconden en el corazón de las montañas nevadas.
A lo largo de la novela, se mezcla con naturalidad lo real y lo fantástico, lo legendario y las pequeñas cosas de la vida cotidiana. Todo un acierto, sin duda. Además, cabe destacar el lirismo de las descripciones, las potentes imágenes visuales, la prosa cuidada y, a la vez, su fácil lectura.
Se trata, por tanto, de un libro que enganchará al público juvenil por el misterio y la aventura, que no faltan, pero que también disfrutará todo aquel que guste de la buena literatura.