viernes, 26 de junio de 2009

La apelación (John Grisham)

Plaza y Janes. 480 páginas. De 17 años en adelante.
Tras largos meses de fieros e interminables pleitos, el jurado de un tribunal de Missisipi por fin toma una decisión en el polémico caso que enfrenta a Jeannette Baker, una pobre mujer del condado imaginario de Bowmore, contra la poderosísima firma Krane Chemical, indrustria química que, por negligencia, han vertido ilegalmente residuos tóxicos altamente cancerígenos al saneamiento local del condado. El resultado es trágico: la mayor incidencia de tumores malignos de la historia en aquella zona, saldada con mucho sufrimiento y muertes, entre otras, del marido y el hijo de Baker. El matrimonio Payton, de un pequeño bufete, decide estar dispuesto a perder todo con tal de llevar a la poderosa empresa a juicio y recibir la indemnización merecida, así como castigar a aquellos a los que nada les importa con tal de llenarse las billeteras.

El fallo del jurado resulta sorprendente para Krane: reconoce el daño causado y le obliga a una indemnización de decenas de millones. Pero eso no es lo peor. Una vez perdido el primer juicio, todos los demás afectados por la peste presentarían sus querellas. El propietario de la empresa, el todopoderoso Karl Trudeau, que se enorgullece de su bella tercera esposa, un apartamento de lujo en Manhattan y un puesto digno en la lista Forbes -donde figuran las cuatrocientas personas con más fortuna del mundo-, confía en que la apelación al Tribunal Supremo de Missisipi le devuelva el respeto perdido. Sin embargo, es necesario antes acabar con las posturas moderadas del total de nueve jueces que lo forman, sustituyéndo al menos a una por un joven abogado, Ron Fisk, conservador y cristiano, prometedor. Lo moldearán a su manera y lo lanzarán en una campaña para alcanzar el cargo en el Supremo, ya que Missisipi es de los pocos estados en los que los jueces no son nombrados, sino elegido por votación. La lucha de intereses ha comenzado.

Grisham vuelve a sorprender, y con éxito, en esta reciente novela. Aunque no abandona el género de thriller legal en el que se ha encumbrado como líder indiscutible -cada entrega nueva se convierte en un best-seller mundial y punto de mira para los proyectos de Hollywood-, esta novela marca una nueva etapa en su narrativa. Lo que antes eran sin más historias con un argumento cargado de intriga que "enganchaban" al lector con independencia de la mejor o peor calidad del relato, ahora se ha convertido en una trama cargada de significación literaria, social, e incluso moral.

El autor, aprovechándose de su conocimiento director del mundo de la política y la justicia, no menosprecia su experimentado talento narrativo para acometer un argumento, que más que una ficción es un fiel retrato de la corrupción política y judicial en la alta sociedad, de la actitud de distintos grupos y personas ante los grandes dramas de la vida... La crítica se hace dura por momentos, incluso abierta a la sátira despiadad. El pleito que ocupa las numerosas páginas del libro se convierte en un punto de confluencia de las más variopintas personas que en el mundo cabe: los despiadados y avariciosos multimillonarios de Manhattan, abogados litingantes pero ilusionados por la causa, los grandes jefes de todo tipo de lobbys y grupos de presión, pastores entregados solícitos a su rebaño con objetivos más o menos nobles, humildes personas que viven en la miseria... Los intereses económicos y clasistas se cruzan y se produce el conflicto que sólo vencerá no quien tenga mejores intenciones, sino quien disponga de los mejores medios. Todo invita al análisis crítico y racional por parte del lector.

Los personajes están muy bien caracterizados, sin bien es cierto que en ocasiones caen etiquetados sin más preámbulos dentro del grupo donde mejor están caracterizados; no tiene pérdida la evolución del personaje clave: Ron Fisk, que al final dará una sorpresa.

Su final, como la sinopsis de la edición española indica, sorprenderá a muchos lectores, quizá despertando a primera vista indicios de decepción. Sin embargo, cuando se analiza en frío, uno comprende el verdadero propósito del autor: no es la clásica historia de unos buenos que luchan contra los malos y les vencen sin problemas, sino de personas reales que se encuentran ante los problemas de la vida y la sociedad, y reaccionan de una u otra manera según sus principios y presiones del entorno. Recuerda en este sentido el propósito de la conclusión que cierra la célebre obra maestra Rebelión en la granja, de George Orwell: no finaliza como le gustaría al lector, sino como debe.

Otra vuelta de tuerca (Henry James)

Editorial Anaya, col. "Tus Libros" 1996, 13ª ed.; 190 pp. De 15 años en adelante.
En la clásica Inglaterra victoriana, una joven institutriz es contratada por un rico asentado en Londres para encargarse de la educación de sus dos sobrinos, Flora y Miles, que viven en una casa de campo de Essex.

Los niños son totalmente huérfanos, y su tio se considera demasiado atareado como para hacerse cargo de ellos. Por ello, tras la muerte del mayordomo Quint y la antigua institutriz Jessel, la protagonista, caracterizada como una mujer joven, soltera, creyente y con valores, pero de quien se desconoce su origen y su identidad, se hace cargo de dicha tarea.

Al comienzo apasionada por una profesión que le gusta y unos niños al parecer adorables, una imponente sombra comienza a cernirse sobre la paz de la casa. Los niños comienzan a comportarse de una forma extraña. La novata comienza a comprender que no está sola en la casa. La extraña muerte de los pasados mayordomo y educadora, que compartían un amor ilícito y un odio por los chicos, no ha quedado en nada. Los fantasmas del terror parecen resurgir del infierno como una maldición de venganza. Pronto, la protagonista comprenderá cual es su cometido en la trama: hacer todo lo posible para evitar que los inocentes chicos caigan para siempre en las garras del diablo.

Un lector de las jóvenes generaciones no encontrará en este libro la narrativa a la que está acostumbrado. El autor, maestro de la novela decimonónica y de los primeros años del siglo XX, utiliza un estilo rico en belleza y fuerza de palabra, superando con éxito el reto de introducirse en la psicología de una mujer joven, muy sentimental y aterrorizada por los hechos. Es por ello que el lector puede encontrar la lectura pesada y atrasada en más de cien años. Ciertamente, no es la lectura fácil y entretenida a la que el público está acostumbrado. También el terror y suspense que pretende infundir el autor no parece surjir su efecto, de nuevo por la costumbre del nuevo público al terror del estilo de Stephen King, The ring, El exorcista..., aunque ha sido inspiración de aclamados títulos como la cinta Los otros; no obstante, es recomendable al interesado por la narrativa clásica.

martes, 23 de junio de 2009

Hermanos de sangre (Stephen E. Ambrose)

Editorial Inédita. 505 páginas. De 17 años en adelante.
Este libro narra las historias de los hombres que formaron la compañía E del 506 Regimiento de Infantería Paracadista del Ejército de Estados Unidos desde sus primeras maniobras en el campamento Toccoa hasta el Nido del Águila de Hitler, pasando, por supuesto, por el mítico día D. Es la historia llevada a la conocida serie de televisión por Steven Spilberg, que tanto éxito tuvo. Pero el libro es mejor, y haber visto la serie no te perjudicará nada, al contrario, te ayudará a no perderte entre tanto personaje que aparece o a visualizar el caos de la guerra. Tiene la fuerza de ser una historia real narrada a través de recuerdos y testimonios, reconstruída por un historiador. Es una historia de coraje y supervivencia, pero sobre todo de amistad, de lealtad, de confianza entre unos hombres que fueron capaces de sacrificarse hasta el punto de dar la vida unos por otros. Son escalofriantes algunos fragementos de las cartas que escribían a sus familiares. No oculta los horrores de la guerra, ni mitifica ni cae en el sentimentalismo o en la pedantería. Es una historia de hombres corrientes que se convierten en amigos y se ven obligados a ser héroes para sobrevivir. Si te gusta el género no podrás dejar de leer.
Ver vídeo de la serie.

La comedia humana (William Saroyan)

Editorial Acantilado. 210 pág. De 16 años en adelante.
Homer es un chico de unos 15 años que trabaja como mensajero para una compañía de telégrafos en una pequeña población norteamericana durante la Segunda Guerra Mundial. Su trabajo le convierte en testigo de la vida cotidiana de los habitantes del valle y, en ocasiones, en transmisor de terribles noticias.
Aparentemente un drama, en realidad es una deliciosa y simpática novela que dejará en el lector el regusto de la verdadera amistad, de la importancia de una familia unida, de la superación e ilusión juveniles, y la convicción de que hay gente buena en el mundo.
La comedia humana se lee fácil, está muy bien escrita y engancha, porque los personajes interesan. Hace falta un poquito de sensibilidad para pillarlo, pero tampoco demasiada. Quizá no sea un libro para primerizos ni para los que sólo quieren dragones y batallas. Lo recomiendo cien por cien.

domingo, 21 de junio de 2009

Oficial de Caballería (Allan Mallinson)

Editorial Edhasa. 507 páginas. De 17 años en adelante.

Es el primer libro de una larga serie (ya van por diez) que tiene como protagonista a Matthew Hervey, un oficial del Sexto de Dragones del ejército Inglés. Es un libro tremendamente militar donde se descubre el mundo de un regimiento de caballería en plenas guerras napoleónicas.

Una época, absolutamente distinta a la nuestra, donde las guerras son tan frecuentes que tienen hasta su nobleza, sin dejar de ser crueles y causa de tremendas injusticias.

Matthew es un joven oficial que tiene condiciones para ascender. No obstante el general Slade le tiene enfrentado y pone su veto al ascenso aunque el teniente Hervey no deje de dar motivos, en el campo de batalla e, incluso, en tiempos de paz, para conseguir ser mejor tratado por el ejército de su majestad.

Comienza con una batalla en Toulouse donde destaca por una acción heróica pero que acaba volviéndose contra él. El final lo encontraremos en la sangrienta batalla de Waterloo el 18 de junio de 1815 donde los 67.661 hombres del duque de Wellington se enfrentaron en una auténtica carnicería a los 71.947 soldados comandados por el Emperador Napoleón Bonaparte.

Guerra de estrategia, posicionamiento de los regimientos, elección del lugar más apropiado, paciencia para entrar en combate en el momento oportuno y valor, sobre todo valor para enfrentarse cuerpo a cuerpo o avanzar bajo una lluvia letal provocada por los artilleros. Confusión en el campo de batalla, miedo a la traición, dificultades de abastecimiento... Todo esto y muchas más cosas que se refieren también a la situación personal de cada soldado interviene en el desenlace final de cada batalla y, a la postre, de la guerra.

No es una lectura para principiantes. Hay que tener paciencia para dejarse llevar por una narración descriptiva y, muchas veces, sicológica, sin buscar ansiosamente la acción, aunque también la hay.

Una figura, la del teniente Hervey, que va quedando perfectamente delineada por el autor, llegando a producir en el lector una profunda admiración por un hombre recto que sabe seguir su conciencia a pesar de que esto pueda acarrearle graves prejuicios: la justicia está por delante de la obediencia militar.

Maravillosa obra que gustará a los amantes de la historia y de la vida castrense.

Libros Juveniles