La maldición de Ra (Naguib Mahfuz)

Edhasa. 205 pág. A partir de 15 años.

Emocionante novela que recrea el apogeo del rey egipcio Keops, que daría nombre a la famosa pirámide. Una profecía anuncia el declive de la familia real y señala a su sucesor. A partir de ese momento la obsesión del faraón será acabar con esa amenaza y cambiar el signo de los dioses.

La historia es amena y está bien escrita, y hay cierta tensión que a ratos hace difícil dejar la lectura, aunque a veces sea un pelín previsible. Manfuz, que fue premio Nobel en 1988 ha hecho famosas las historias de faraones, recrea muy bien el ambiente en el país del Nilo, que en esta ocasión sitúa en la IV dinastía, una de las más apasionantes del Egipto faraónico. La ventaja, además, es que sabe hacerla asequible al lector occidental. La novela, por otro lado, tiene todos los ingredientes de la novela juvenil de aventuras: acción, guerra, traición, lealtad, amor sin empalago, amistad... Recomendable.

Hexwood (Diana Wynne Jones)

Edtorial Uroboros Juvenil. De 13 años en adelante.

Anne vive en la misma calle que la vieja granja Hexwood. Nunca se había fijado mucho en ella, siempre había estado allí, pero un día que se encontraba enferma comenzó a ver cosas extrañas. Aquel viejo caserón al que nunca entraba nadie comenzó a recibir visitas. Gente que entraba pero no salía. Las vestimentas de los visitantes eran, además, un tanto estrafalarias.

Cuando se puso bien se acercó al parque que albergaba la finca para ver si podía ver algo extraño. No se veía nada en el interior pero, en el propio bosque se encontraría con una sorpresa que le cambiaría el resto de sus días.

Desde la tierra comenzó a surgir un hombre semidesnudo que sin ningún esfuerzo hizo crecer una vieja túnica para que le cubriera.

Ella intenta esconderse pero había sido vista. Aquel extraño personaje le sigue hasta el pie del árbol donde se había encaramado para que no le viera.

Aunque tímidamente al principio en ese día comenzó una extraña relación entre ellos y se sucedieron las visitas.

No fue lo único raro que encontró en aquel bosque. Cada día que lo visitaba aparecían nuevos paisajes: ríos, cataratas e, incloso, un viejo castillo no muy lejos de allí.

Aquel hombre aseguraba que había salido de un sueño que había durado siglos. No era fácil creerselo pero los extraños sucesos que se sucedían en su compañía hacían nacer en ella una sombra de duda.

Aunque parece que todo sucede en un bucólico bosque, la realidad es que ese escenario es sólo un pequeño punto de la verdadera trama.

Detrás de esa vieja granja hay nada menos que una conspiración interplanetaria. Las grandes casas que dominan la galaxia están muy interesadas en la tierra porque es el único planeta que posee un mineral muy preciado.

Parece que todo este embrollo está causado por una vieja máquina que ha empezado a funcionar sin control y es capaz de controlar el espacio y el tiempo creando un mundo ficticio con capacidad de atrapar a los humanos en sus redes.

Los jefes de la casa dominante no dudan en intervenir y tendrán que tomar cartas en el asunto personalmente. Así que la tierra se convierte en el escenario de una lucha intergaláctica que por acción del Bannus (así se llama aquella máquina) se desarrolla en un ambiente medieval con dragones y todo.

Es una historia realmente fantástica. La desbordante imaginación de la autora es eso: desbordante, tanto que, a veces, no es fácil seguir el hilo. Cuesta un poco entrar en la historia.

El Viento de los Dioses (César Vidal)

Ediciones Martínez Roca. 352 pag. De 15 años en adelante.

A finales de siglo XIII, un poderoso contingente mongol enviado por el Khan Kublai Jan llega a las costas de Japón dispuesta a subyugar esas misteriosas tierras. Tras éxitos iniciales, serán repelidos por las inclemencias del tiempo. Los nativos comenzarán a afirmar que los dioses están con ellos.

Fan es un erudito chino que parte con las tropas como encargado de la maquinaria de guerra y para tomar un papel administrativo en las nuevas tierras que pretendían conquistar. Será retenido en el archipiélago tras la derrota de sus tropas, y convertido en esclavo de Nyogen, un joven samurái fiel a su código y a sus antiguas tradiciones.La convivencia entre ambos dará lugar a interesantes debates en que las radicales diferencias entre dos mundos geográficamente muy próximos se pondrán de manifiesto.

Con un fuerte ritmo inicial, el argumento va perdiendo fuelle con forme se acerca la conclusión de la trama. Los personajes, bien retratados, acaban perdiéndose en conversaciones profundas y muy interesantes, pero que dejan sin fuerza al resto de la historia, que acaba con sucesos breves y simples, sin responder a la acción esperada por el lector. Puede ayudar a comprender sucesos históricos de un mundo tan lejano y algunos rasgos de una cultura rica pero totalmente extraña.

La Batalla de los Cuatro Reyes (César Vidal)

Cuando corre el año 1212, en la península fragmentada en reinos moros y cristianos, Nuño y Yago, dos jóvenes en busca de aventuras, parten presurosos hacia Toledo. Su objetivo es unirse al variado ejército que el rey Alfonso VII de Castilla prepara un poderoso ejército compuest0 por castellanos, aragones y navarros liderados por Pedro II y Sancho VII el Fuerte, respectivamente, portugueses y voluntarios franceses y leoneses.

Las tropas marcharán al sur para enfrentarse a las aguerridas tropas almohades lideradas por Muhammad An-Nasir en la batalla que pasará a la historia como las Navas de Tolosa. Los dos jóvenes experimentarán las caras más heroicas y más deleznables de la guerra: valentía, fanatismo, fuerza y crudeza. Por el camino encontrarán a un misteriosos pastor y mocete moro, que serán claves en la victoria final de los cristianos.

Aunque hila muy bien los hechos y construye correctamente a los personajes, la resolución final de la trama parece simple y deja no pocas expectativas. Lectura breve, sencilla, precisa en detalles históricos.

La Última Legión (V. M. Manfredi)

Editorial Grijalbo. De 15 años en adelante.

Aurelio, un oficial de la última legión romana, debe abandonar el campamento de la Nova Invicta en busca de refuerzos pues están siendo atacados por las fuerzas de Odoacro. Pero todas sus esperanzas caen por tierra cuando ve la masacre de la casa del César. Llega a tiempo para oir las últimas palabras del padre del joven César Rómulo, de trece años, y son, precisamente esas palabras, las que le llevarán a vivir una terrible aventura.

La palabra dada por un legionario romano es sagrada y Aurelio ha prometido rescatar a Rómulo de las hordas bárbaras que se han hecho con el imperio. Debe liberarle y ponerle a salvo. Pero son muchos los interesados en la suerte del pequeño Rómulo. Hay un golpe de estado en Occidente, el imperio de oriente tiene también sus propios planes y, por si fuera poco, la codicia de unos y el odio de otros harán que el cometido de Aurelio sea una auténtica locura.

Sin tener en cuenta los peligros que asume, Aurelio tendrá de arriesgar su vida y la de sus amigos muchas veces para salvar a Rómulo del odio de Wulfila, unos de los generales de Odoacro que persigue con saña al pequeño.

Aurelio tendrá que pasar también por un drama interior. Las sombras del pasado pesan sobre su conciencia y le impedirán seguir los deseos de su corazón.

Una novela trepidante. En algunas ocasiones algo dura y no faltan comentarios y acciones de la soldadesca que dejan mucho que desear. No obstante, no se para en detalles y queda, por encima de todo, un regusto bueno pues se ensalzan valores como el honor, la amistad, la fidelidad, la valentía y un largo etcétera de virtudes de unos hombres forjados en las dificultades y que nada tienen en la vida salvo la amistad y el propio honor.

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