Edhasa. 205 pág. A partir de 15 años. Emocionante novela que recrea el apogeo del rey egipcio Keops, que daría nombre a la famosa pirámide. Una profecía anuncia el declive de la familia real y señala a su sucesor. A partir de ese momento la obsesión del faraón será acabar con esa amenaza y cambiar el signo de los dioses.
La historia es amena y está bien escrita, y hay cierta tensión que a ratos hace difícil dejar la lectura, aunque a veces sea un pelín previsible. Manfuz, que fue premio Nobel en 1988 ha hecho famosas las historias de faraones, recrea muy bien el ambiente en el país del Nilo, que en esta ocasión sitúa en la IV dinastía, una de las más apasionantes del Egipto faraónico. La ventaja, además, es que sabe hacerla asequible al lector occidental. La novela, por otro lado, tiene todos los ingredientes de la novela juvenil de aventuras: acción, guerra, traición, lealtad, amor sin empalago, amistad... Recomendable.
Lo acabo de terminar y la verdad es que me ha encantado. A veces se pasa un poco de poético, por decirlo de alguna manera, porque está escrito bastante al modo de la época. Pero tiene también frases muy bonitas y trascendentes dentro de toda esa poesía.
ResponderEliminarDe todos modos, engancha y me ha hecho llorar, reír, asombrarme y en ocasiones pegarme a las páginas de tensión.
Está bastante bien para quien le guste le novela histórica de esta época.
Si queréis pasar un buen rato y leer algo distinto os lo recomiendo.