El Último Grito (Concha López Narváez y María Salmerón)

Editorial Bruño. Col. Paralelo Cero. Año 2011. 120 páginas. De quince años en adelante.

Otto von Rotstein cuando cree que despierta de una terrible pesadilla ve que su cuerpo no responde y que a su lado se entonan cánticos de difuntos y no se oyen más que sollozos. ¿Será eso la muerte?

La falta de noticias de Maximillian que partió hace diez años a la guerra es razón suficiente para pensar que haya corrido la misma suerte que su padre y haya muerto blandiendo las armas en defensa del imperio Alemán durante la guerra de los Treinta Años.

Pero su esposa Hanna no quiere reconocer su muerte hasta que no tenga una certeza que no llegaría nunca.

Otto se desespera pues siempre quiso a Hanna aunque esta prefirió en su día a su primo Maximilian y se casó con él. Aconsejado por el anciano sabio don Nathan de Praga, que vive en su castillo desde antes de su nacimiento, emprende un largo viaje con la intención de dar con esa "certeza" que le abriría las puertas a su matrimonio con Hanna y ha heredar el ducado de la familia Rotstein.

Al salir del patio de armas Otto no puede ni imaginarse el peligroso viaje que ha preparado don Nathan. Los acontecimientos se suceden con rapidez y a Otto no le da casi tiempo a decidir si está o no de acuerdo con los planes de don Nathan. Tendrá que enfrentarse a su propia conciencia y a algo más terrible que su propia muerte si quiere llegar a buen fin en ese camino que se ha abierto y en el cual no parece más que un títere en manos de una fatal tragedia.

Un libro que se lee rápido por lo breve y porque la propia historia cabalga desenfrenada.