Editorial Salamandra. Libro original publicado en 2014. Publicado en español en 2017. 224 páginas. A partir de los 12 años de edad.
La autora de este libro decidió ubicar la historia en París tras una estancia en la bella capital francesa motivada por su trabajo. Pero antes de eso ya tenía bastante experiencia en pasearse por los tejados en su época de estudiante universitaria en un College de Oxford. Como su "mamá" de pluma, Sophie es inglesa pero se traslada a París para buscar a su madre.
Después de sobrevivir a un naufragio y con apenas un año de vida, Charles la encuentra en el interior de una funda de violonchelo entre partituras de música clásica. Su padre por casualidad le da una educación tan poco convencional que los servicios sociales de protección al menor lo vigilan de cerca para arrebatársela.
Con una infancia en un orfanato, Sophie se nos presenta como una chica bastante peculiar que se enfrenta a su destino y al estilo de los héroes de Dickens (huérfanos, calles, ambientación inglesa, la dureza de las leyes, etc.) se mueve entre lo más oscuro y olvidado de las calles para recuperar una vida que le pertenece pero que desconoce totalmente.
Los tejabundos son niños de nadie que sobreviven a fuerza de voluntad y coraje en los tejados de los edificios. Todos prefieren esa vida a la de los orfanatos donde lejos de recibir cariño reciben un trato que no admiten.
Con un estilo desenfadado, de fácil lectura y la propuesta de un paseo por París de mano de la protagonista y sus nuevos amigos desde una perspectiva más elevada a la que estamos acostumbrados estamos ante una lectura que nos puede aportar mucho. El desenlace de la historia se sucede de forma bastante precipitada y rápida, porque lo más fundamental es la trama. La amistad, la libertad, la importancia de la familia, la educación, la amistad y el sentido de encontrar tu sitio.
Después de sobrevivir a un naufragio y con apenas un año de vida, Charles la encuentra en el interior de una funda de violonchelo entre partituras de música clásica. Su padre por casualidad le da una educación tan poco convencional que los servicios sociales de protección al menor lo vigilan de cerca para arrebatársela.
Con una infancia en un orfanato, Sophie se nos presenta como una chica bastante peculiar que se enfrenta a su destino y al estilo de los héroes de Dickens (huérfanos, calles, ambientación inglesa, la dureza de las leyes, etc.) se mueve entre lo más oscuro y olvidado de las calles para recuperar una vida que le pertenece pero que desconoce totalmente.
Los tejabundos son niños de nadie que sobreviven a fuerza de voluntad y coraje en los tejados de los edificios. Todos prefieren esa vida a la de los orfanatos donde lejos de recibir cariño reciben un trato que no admiten.
Con un estilo desenfadado, de fácil lectura y la propuesta de un paseo por París de mano de la protagonista y sus nuevos amigos desde una perspectiva más elevada a la que estamos acostumbrados estamos ante una lectura que nos puede aportar mucho. El desenlace de la historia se sucede de forma bastante precipitada y rápida, porque lo más fundamental es la trama. La amistad, la libertad, la importancia de la familia, la educación, la amistad y el sentido de encontrar tu sitio.
Más información sobre este libro y otros directamente relacionados con la historia en la página web de Boolino.
Katherine Rundell es una escritora inglesa que se crió entre África y Europa. Se trata de una autora juvenil muy prolífica y amada por los lectores jóvenes y lo que ya no lo son tanto. Tiene un estilo narrativo muy característico y las ambientaciones de sus historias son magníficas y sus personajes llenos de fuerza. Además de este libro ha escrito muchos otros muy interesesantes, pero todavía no traducidos al español, como: Roftoppers, Cartwheeling in Thunderstorms, The Girl Savage y The Wolf Wilder.
La página web oficial de la autora, en inglés, aquí.
